3 ángeles en 5 años
A veces me ha costado entender por qué la vida me ha traído hasta Australia. Desde la adolescencia sabía que en algún momento de mi vida viviría en otro país, no sé porque, simplemente lo sabía.
No sabía cómo, dónde o cuándo y mucho menos que la razón que me daría la fuerza y determinación de dejar a mi familia y toda mi vida ahí, sería el amor.
Hoy llevo 9 años en este nuevo país y a través de este tiempo he logrado comprender para qué la vida eligió un lugar tan lejos de mi país y es que estando aquí, lejos de todo lo conocido, lejos de mis raíces, es cuando realmente he podido conectar conmigo, con mi propósito de vida, con el amor hacia mí misma.
Aquí es cuando más he logrado escucharme, sentirme y darme cuenta de los miedos y creencias que aún tengo tan arraigados.
Pero no todo es tan sencillo, siempre he pensado que todo en la vida te lleva a sacrificar algo y cuando te vas a otro país, el sacrificio más desafiante es dejar a tus seres amados, principalmente a tu familia y esto es lo que más me ha costado al estar tan lejos en Australia.
Hace unos días, nuevamente la vida me sorprendió de la forma más inesperada y menos deseada. La pérdida de mamá, mi imagen materna, la mujer que me dio la vida, mi tercera pérdida.
Ya partieron las 3 personas por las que tanto luché, a quienes amé, apoyé y sobre todo las que más me impulsaron a seguir avanzando y lograr cosas para ver por ellos y compartir. Papá, mi hermana mayor y mamá. Hoy ya están en el cielo.
Una de las peores cosas de vivir tan lejos, es que por más posibilidades que tengas para comprar el boleto de avión, simplemente no llegas a tiempo ya que son más de 24 horas de viaje hacia México. Así que he tenido que aprender a valorar, aceptar y vivir las pérdidas desde lejos.
Mi problema no ha sido no estar en su partida o velorio, ya que estuve en vida, muy cerca y al pendiente de cada uno de ellos, eso sí, cada uno con diferentes procesos.
Para mí lo duro es no abrazar, llorar, consolar y consolarme con los que amas y te aman, sentir esos abrazos, poder llorar en sus regazos.
¿Sabes?, llevo un año desde que inicié el duelo con mamá ya que, debido a su demencia, ya no me reconocía. La había perdido como madre, quedaba la mujer y ahora la he perdido completamente.
Y hace unos días su corazón decidió dejar de latir…
¿Qué es lo más increíble y sorpresivo?, que mi hermana el 10 de mayo cumple 1 año de su partida, ambas decidieron irse en mayo, y eso me hace pensar que mi hermana no pudo estar más sin ella y vino a buscarla. Eran inseparables hasta para dormir.
Y hoy estoy aquí a mis 2 de la mañana escribiendo esto, ya que tengo una enorme necesidad de decirte que si has perdido o pierdes a alguien estando lejos “No te sientas culpable”, si tú sabes que en vida estuviste cerca, al pendiente, dando amor, recibiendo amor, la culpabilidad no tiene por qué tener un espacio en tu ser.
Hay tantas personas que son mejores hijos, padres, hermanos, amigos estando lejos, que los que están viviendo en el mismo sitio. La distancia no es un impedimento para amar y, mucho menos hoy en día.
¿Qué puedes hacer si te sientes culpable?
– Escríbele una carta con todo lo que sientes, expresa tu perdón, saca todo lo que hay en ti.
– Prende una vela blanca para ti y la otra persona
– Trabaja la aceptación y suelta.
– Y lo más importante es que si hoy te arrepientes de algo o tienes en tu mente los espantosos “hubiera”. Es momento de compensarlos y compensar todo ese amor que pudiste haberle tenido a esa persona, con los que aún están en vida, ¿cómo?, no cometiendo el mismo error.
– No dejes que el trabajo te consuma y eso haga que le des menos calidad de tiempo a los que amas.
– No dejes de responder un mensaje.
– No dejes de llamarles y simplemente preguntar ¿cómo estás?
¿Te has dado cuenta de que siempre que vivimos o nos enteramos de un fallecimiento es cuando llegamos a pensar que estaremos más cerca de las personas que amamos?
Y luego pasa el tiempo y volvemos al mismo estado natural de envolvernos en las cosas del exterior.
Dar tiempo en calidad es lo más importante y vivir lejos no es un impedimento para dar y expresar amor y si vives cerca, mucho menos.
Vive tu duelo como tu ser lo necesite y te lo estoy diciendo a ti, pero a su vez muchísimo a mí, ya que soy de las personas que no se permite caer.
El padre en la misa de mamá dio este mensaje:
Siempre nos damos tiempo para lo que de verdad nos interesa. Así que no es falta de tiempo, es que el amor por esa persona no es suficiente ya que, si fuera suficiente, te darías el tiempo.
Te mando un abrazo con todo mi amor.
Gracias por leerme y por estar aquí, caminando juntas.
Con amor aquí y ahora
Jessica Alcalá
